domingo, 16 de abril de 2017

¡Soy la MÁS BLANCA de la playa!

En esta Semana Santa, me encuentro descansando y disfrutando de la playa.
Me ha sorprendido la variedad de comentarios que he recibido frente al COLOR DE MI PIEL: "Estás super bronceada" ¡jaja! "Te ha cogido mucho el sol" ¡jaja! "Hoy si estás más bronceada que ayer", etc.

Y en realidad lo que no saben ni entienden, es que mi propósito no era venir a broncearme; si no a descansar. La mayoría de horas en las que he estado en contacto con el sol ha sido después de las 3 de la tarde y la mayor parte del tiempo, desde la sombra. 


Sin embargo tengo que decir que no siempre he sido así, hace años atrás ME ENCANTABA BRONCEARME y pasaba horas y horas en el sol, no obstante hoy en día, soy consciente que tomar sol en una forma desaforada no es sinónimo de salud, si no ARRIESGARSE A DAÑAR LA PIEL, buscar el envejecimiento prematuro y el cáncer de piel. 
Esto lo aprendí gracias a mi hermana dermatóloga y mi papá que falleció hace 3 meses y medio, quien por su blancura y exposición al sol tuvo varios cáncer de piel y aunque ese no fue el cáncer del que murió, me ayudó a tomar conciencia que DIOS ME HIZO ASÍ, y ¡está bien!
Sin saber, me estaba uniendo a la "MODA BLANCA" que se está imponiendo hoy en día en celebrities, blogguers y Millennials de otros países, donde tener la PIEL BLANCA ES TENDENCIA sobre todo en las menores de 35, que crecieron junto a todas las campañas de concientización del daño de la capa de ozono y los efectos del sol. 
Ahora, las pieles blancas son vistas como algo ATRACTIVO Y ELEGANTE y una prueba de conducta saludable, contrario a lo que sucedía antes, o sigue sucediendo aún, donde el estar bronceado era sinónimo de salud y de belleza.
Cómo Asesora de imagen a mis clientes de piel blanca que se sienten acomplejadas por su "blancura" siempre les digo que no hay nada de malo, pero si por esa razón no se animan a mostrar sus piernas, les recomiendo los autobronceadores y los diferentes maquillajes de piernas que existen en el mercado, sin tener que que recurrir a dañar su piel con el sol o cámaras bronceadoras. 

Eso sí, aclaro, que si eres una afortunada de tener piel negra, trigueña o bronceada natural, disfrútala; ¡es perfecta! ¡Igualmente si eres blanca! 

¡Que viva la belleza natural!







No hay comentarios.:

Publicar un comentario